La Palabra de la Semana

1 Samuel 16:1

“Dijo Jehová a Samuel: ¿Hasta cuándo llorarás a Saúl, habiéndolo yo desechado para que no reine sobre Israel? Llena tu cuerno de aceite, y ven, te enviaré a Isaí de Belén, porque de sus hijos me he provisto de rey.”

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La intercesión mueve, agita y acelera.

Acelera hasta que se cumple lo dicho por Dios. Lo que Dios dice se cumple.

Miremos la vida de Samuel. Dios movió a Samuel hasta la casa de Isaí padre de David para ungir a uno de sus hijos como rey y la corona cayó sobre David. Un siervo y pastor de ovejas, un hijo obediente que Dios lo tenía elegido para triunfar con él y cumplió Dios el propósito que tenía para con David hasta la muerte.

Lo que Dios dice así es, y nadie lo puede cambiar.

Dios quiere cumplir un propósito contigo, no sé en donde estás, qué estás haciendo o quién sos o como eres si eres gordo, flaco, alto o pequeño. Sí eres preparado o si tienes título

Dios ve tu obediencia y tu disponibilidad. Dios quiere que seas obediente y dispuesto como lo fue David.

Yo quiero orar por ti

Padre gracias, vengo presentándote a estas vidas que a través de este

mensaje lograrán a comprender y entender cómo poder acercarse a ti. Ayúdalos, quita la venda de sus

ojos y pone colirio para que te vean

y caminar en obediencia y puedas cumplir el propósito con ellos también

gracias señor amén y amén.